Profundidades
Zurciendo manchas negras
con blancos hilos de espejos,
sentí la ternura del hombre
poseyendo mi cuerpo.....
Cercanías de caricias
subyugaron la fragilidad
ávida y transparente de aguas.
Tuve sueños de vientre,
tuve sueños mojados
allá en mis profundidades...
Caos
Mi intrepidez, tierna hoja caída
de estropeados árboles,
de estropeadas noches
de tierras precoces de sequía,
en ándenes melancólicos
busca la noche esperanza...
Sin espacio
Mis sueños sin espacio,
realidad invertida
en espasmódicos suelos
de colesteroles altos,
espacio desnudos de noche
con sus melancolías bajas...
Lobos
Deshojo al estepario aire
con sus lobos sedientos,
arañazos de niña piel,
desfloración instántanea
de vientre,
de abismo penetrable
Entonces...
La savia-vida mana....
Invito
Salpica de tierra mis recuerdos,
destila mi entusiamo de piedra,
destierra mi suelo de arenas,
ama mis huesos de alambre,
siéntate en mi angustia de días,
siembra tu árbol ...
Hombre
Espejo de turbulencia,
diablo salvaje de huracán.
Mi vientre de entusiamo
en su humor blanco,
arropa la dulzura del óvulo
pregón de vida..
Hay clorofilas interiores...
No es tiempo de palabras....
Efigie de nadie
El niño perfecto en su noche
demostró no serlo.
La madre golpeante de hosquedad
saldó en el hijo la venganza del óvulo
fecundado en su azar.
Llanto matricida de instinto
escuchó silencios de urbe
aquella somnolienta mañana
de niño imperfecto,
buscando en vacíos efigie de madre.
Declive
Estoy en uno de eso días
míos y no míos...
Un Parsel abrió sus fauces
tragándome de ánimo.
Después de mi guerra
ando y desando
mis silencios de estrógenos.
No calzan mis zapatos de calle...
Cuatro paredes entremezclan
sus olores ácidos.
Sonríen mis techos oblícuos
y caen...
Mi cama se levanta
y me pierdo interiormente
camino entre nosotros...
Interrupto
El hombre se levantó en su noche
de bostezos largos
cepillando su espejo
de miserias lentas.
un célibe cigarrillo mustio
en su reposo de humo
deleito su indolencia.
A tu puerta
la pobreza sacude el zapato de hijo
cuando entra a tu casa.
Entró saliendo.
Un café azúcar amargo
no le alcanzó en los labios.
visita de regreso,
pero recogió primero
el olor de su zapato
dejado en tu puerta.
Arpegios
Quiero morir de música,
suspendida en arpegios de
aireeeeee...
Sin declives...
Sin cárceles..
Sin desencantos contrarios.
Gruesamente a la inversa
la música exculpará
la debilidad de alma.
